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Crecer o no Crecer… – La Crítica Constructiva – Arq. Di Costa

LA CRÍTICA CONSTRUCTIVA    

CRECER O NO CRECER…

He allí la cuestión… Una vez que el trabajo de una empresa crece más allá de la capacidad de un solo individuo, una organización se hace necesaria. Se deben asignar varios trabajos a diferentes personas y coordinar sus esfuerzos. A medida que la empresa crece, el proceso de organización lleva a la formación de departamentos y divisiones, cada cual con una misión particular, es aquí donde el administrador debe poner en práctica algunos de los principios fundamentales de la organización, uno de ellos es el de determinar la forma de organización que, dentro de una empresa se representa como una pirámide.

Es generalmente recomendable que la altura de esta pirámide no sea muy grande, para así tener un flujo rápido de información. Por otro lado, una pirámide demasiado baja, hace que el control del personal se concentre en pocos individuos. Además, dentro de cada empresa existen divisiones o departamentos que organizarán en forma similar al de la empresa. En la construcción, las superintendencias de campo tienden a adoptar un esquema similar a la de la empresa, siendo, en cierta forma, empresas dentro de la empresa.

Otro principio fundamental de organización es el de la descentralización de operaciones. Por lo general, la empresa del sector de la construcción tiene por necesidad, una oficina central y una o varias oficinas de campo. De aquí se desprende que la empresa se organice en la forma más adecuada a sus operaciones. En una compañía centralizada, todas las decisiones se tomarán en la oficina central, y sólo se informará a las oficinas de campo los procedimientos a seguir. La ventaja de esta organización es que las operaciones están integradas dentro de los objetivos de la compañía. La desventaja puede ser que quien toma las decisiones no cuente con la información adecuada. En una compañía descentralizada, el mayor número de decisiones se analizarán en las oficinas de campo, dejando únicamente las decisiones de tipo general a la oficina central. Desde luego, este tipo de organización presupone una integración de objetivos para que la compañía no tenga duplicidad de trabajos.

En realidad, el grado de descentralización de la empresa, variará con las condiciones propias de ella, pero en general, no será una situación de absoluta centralización o de completa descentralización. El organigrama de una empresa constructora arroja una representación gráfica de los roles y la estructura de la organización.

Usando un organigrama, el personal y las partes interesadas pueden reconocer clarament las relaciones operativas, para así conocer cómo funciona este tipo de empresa. El trabajo realizado por una empresa constructora se completa generalmente con un conjunto de personas con diferentes roles y especializaciones. El organigrama de una empresa de construcción puede ayudar a aclarar los canales de comunicación y las áreas de responsabilidad, tanto internamente como con los clientes.

La mayoría de las empresas de construcción son pequeñas compañías llamadas “microempresas”, operadas por un solo propietario con menos de diez empleados. En estas pequeñas acciones, el propietario realiza todas las tareas de gestión de la empresa: Agente de ventas, gerente de proyecto, trabajador calificado y gerente de presupuesto. Sin embargo, en las medianas empresas, dichas labores normalmente se asignan a personas concentradas en tareas especializadas.

 Por Gustavo Di Costa (*)

(*) Arquitecto. Profesor de la Facultad de Arquitectura en la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). Co-Director de ConTécnicos SRL, empresa dedicada a la capacitación en temas de arquitectura y construcción (www.contecnicos.com.ar).

dicarq@yahoo.com.ar

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